Les presento oficialmente a Octavio Pez (...idea de Vicky), uno de mis regalos por mi cumpleaños número 20. Ahora vive en un jarrón de mi mamá, se le ve feliz por ahí, aunque casi no vive para contarla ya que Sergio cometió la imprudencia de patear su pecera (con todo y Octavio dentro). Una gran tragedia: vidrios rotos, agua regada y piedritas de colores en el salón... y el pobre Octavio, así de azul como lo ven, brincaba en medio de la confusión hasta que Nancy hizo bien en meterlo rapidísimo a su botella de agua.
Larga vida a Octavio Pez.
1 comentarios floripondios:
uufffff que bueno que "tavo" pez sobrevivio su aventura y pudo pasar su primer grito sin problemas
besitos
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