¿¡Qué putasmadres sucede con el termómetro corporal del sujeto de starbucks!? Debemos estar a unos -5°C aquí adentro... El frapuccino ya me sabe calentito. Están empezando a meterse algunos pingüinos.

¿Y qué hago en starbucks? Mi casa sigue siendo zona de desastre, mis hermanos y yo somos damnificados de unas reparaciones que están haciendo en el cuarto de las computadoras y pues no tenemos módem inalámbrico (aaah pero eso sí mucho pinche cuarto de computadoras...). Además creo que hubo un tornado en Coapa y no había luz (y menos internet inalámbrico) en ningún establecimiento de por la casa.

Y bueno, ultimadamente me gusta el café engordador y calórico de aquí. ¿Y qué, y qué?

ADVERTENCIA: La confesión que a continuación haré posiblemente parecerá algo mamerta (tal vez más que la palabra gym) pero es neta, me pone contenta y es un logro importante:

Hoy 23 de febrero anduve solita en el metro mucho tiempo. Desde la villa hasta mi casa yooo sola y no me perdí, ni me puse paranoica (no mucho), gané lugar luego luego, no iba viendo a cada rato las estaciones que me faltaban y así. Es un logro porque soy oficialmente dependiente de la compañía.

De hecho, mi dificultad para estar sola es la que me ha hecho impuntual. Como no me gusta estar esperando sola mejor llego un poquito tarde y ya. O dejo de hacer cosas por no tener con quién ir (lo sé, es patético pero cierto) y así. Estando sola me siento fuera de lugar (más de lo usual), me pongo nerviosa (más de lo usual) y soy muuuy torpe (más de lo usual también).